sábado, septiembre 02, 2006

Las Titas, el resto de mi familia



No podría bajo ninguna circunstancia dejar pasar la oportunidad de dejar registrado en este blog la importancia que han tenido no solo para mi sino también para mi esposa e hijos mis tías (tías de parte de Mamá por si acaso). Desde que Yo me acuerdo y si la memoría no me traiciona, siempre he tenido al lado alguna de ellas. Primero cuando era un niño y tuve la fortuna de que ellas ayudaran en mi crianza y en mi formación; gran parte de lo que soy hoy y los valores que ellas con tanto ahínco me inculcaron como el respeto, la solidaridad, el amor al projimo, la caridad y tantos otros que solo pueden nacer de una familia completamente Católica por convicción, han hecho de mi una mejor persona. Pero quienes son mis tías?

Lulú (de chico la llamaba Mamá Luz): No hay palabras para definir a mi tía Lulú, para mí ha sido mi segunda Madre, y creo que esa sería la definición más acertada para ella. Siempre conmigo; aunque nunca tuvo hijos propios, sus sobrinos siempre nos sentimos como sus hijos, con su forma desinteresada de amarnos, de consentirnos; es la tía que nos alcahueteaba llevándonos regalos, comprándonos más golosinas; la que nos daba una "ración" extra de Dinero cuando ya eramos adolescentes y empezamos con nuestras primeras salidas a fiestas y demás. Hoy Lulu, al igual que lo ha hecho conmigo durante toda mí vida (insisto en este punto pues aún hoy sigue siendo la misma), hace lo mismo con mis hijos; Yo por mi parte me siento afortunado de tener una tía como ella y me siento más afortunado aún de saber que todo ese amor y todos esos valores los ha ido transmitiendo también a mis hijos. Hoy mis hijos son su adoración y ella también para ellos. Te amamos Luli.

Teté: En mi vida paulatinamente mi tía Teté cobró cada vez más importancia. Llegó un momento en mi vida en que Teté pasó a ser la tía más importante para mí pues en gran parte de mi juventud compartimos con ella y con su esposo Juan los apartamentos donde viviamos también con mis papás. Fué la tía quien me dió los consejos más importantes durante mi juventud, y de alguna forma fué mi amiga y hasta confidente en algunas etapas de mi vida. Siempre dispuesta a ayudarme, siempre conmigo en las buenas y en las malas; con un temperamento fuerte pero con una inmensa nobleza que Yo aprendí a entender y a respetar como el que más. En cada etapa de nuestra vida existen personas que dejan una marca y una huella imborrable; Teté es una de esas personas en mi vida. Gracias por tu inmenso apoyo, tu bondad, ternura y comprensión; gracias por entenderme y ayudarme siempre que te necesité. Te amo.

Nora y Amparo: Mis otras 2 tías adoradas; dos personas admirables con las cuales siempre hemos contado. Forjadoras invaluables de mis años de niñez, cuando vivía en la Casa materna y compartía con ellas todos los días de esa bonita etapa de la vida. Ellas ayudaron a inculcarme toda una serie de valores que uno solo puede aprender en la Casa; son aquellos valores que se quedan para siempre y los cuales uno quiere a su vez sembrar en sus hijos. Con su ejemplo y su tezón me enseñaron que en la vida no hay que rendirse sino que hay que levantarse y luchar. Muchas gracias tías por su aporte invaluable a lo que soy hoy. Al igual que mis otras tías, mis hijitos también son su adoración. Que afortunado soy al poder rodear a mis hijos de tanto amor y tanta calidez humana. No todo el mundo puede decir esto con tanta seguridad como Yo.

Patty: Ella es la menor de mis tías; y a pesar de que gracias a Dios tuve la oportunidad de compartir con ella gran parte de mi niñez, hoy es con quien menos nos vemos. Es una muy buena mujer; una mujer tan buena y noble que muchas veces se aprovechan de su aparente ingenuidad. Se que Dios debe tener para ella otro planes, mejores planes, pues le ha tocado sufrir mucho en la vida. Patty yo se que desde aqui en adelante te va a ir mejor. Te queremos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

abrase para la gran puta